4:12 AM
Con la quietud insomne, pienso. Divago por mundo extraños, cosas que deberían pasar, cosas que no pasan, que si. La música, el estertor de la gente, el baile, los pasos marcando el ritmo. Esta noche no puedo dormir. Pienso en mi padre. Él escribe casi sin poner su nombre, y que tontería esa de firmar con el nombre propio, como si uno importara, como si uno al fin quedase grabado en la memoria del planeta, como si no fuésemos lo que somos. Y qué seríamos. Recuerdo años atrás en San José, sentados en un sofá del Café, hacíamos trizas las intenciones poeticas de Fulanita de tal, que escribia versos en forma de pregunta. Qué tontería; la de hacer trizas, digo. He cometido tantos crímenes. De alguna forma, entonces, merezco las cosas que no pasan. Recuerdo haber tomado las riendas de mi vida en otras ocasiones, solo para someterme a la quietud, a la certidumbre. Es dificil ser un hombre y estar enamorado, es dificil pasar por la vida sabiendo lo que se sabe y sin palabras para dar a conocer...